La UDA Gramenet disputó la undécima jornada de liga en la Tercera Catalana visitando la
ciudad de l'Hospitalet del Llobregat para rendir visita al Santa Eulália
CF. Los hombres que dirige Remo Forzinetti,
obtuvieron un meritorio punto (2-2) ante
el actual segundo clasificado que no conoce la derrota y en un feudo
en el que tan solo el Vallvidrera había conseguido puntuar (1-1)
hasta la fecha. El choque, atractivo e interesante para
el público congregado en las instalaciones, con una nutrida
representación visitante que viajaron en el “Gramabus” fletado
por el club, anduvo abierto hasta el último suspiro y se dirimió a
un alto voltaje, con dos sistemas tácticos diferenciados, sin
un dominador aparente en el cómputo global e imperando la equidad y
el equilibrio a excepción de veinte excelentes minutos para el
cuadro azulón tras el descanso que pueden catalogarse de muy
importantes y efectivos. Con todo, el montante final puede
analizarse de injusto, pues el empate local se produjo con fortuna
para los ribereños sobrepasado el minuto 90, siendo el cuadro azul y
blanco (hoy con la flamante indumentaria suplente), quien hizo
méritos fundados y contrastados tanto en juego como en acciones
ofensivas, en especial en la segunda parte, para obtener los puntos
en disputa, ante un Santa Eulàlia con escasa pegada que mostró
efectividad en sus llegadas ofensivas. Dos oportunas dianas, la primera desde el punto fatídico, en la segunda entrega (min 48 y 60) del máximo
y astuto artillero, Marcelo Villegas (seis goles en liga), que
resultó determinante y decisivo, permitieron remontar el duelo en
tan solo 12 minutos, cuando el equipo cedía por la mínima tras el
tanto de Kalu en la primera entrega (min 26). Sin embargo en los últimos segundos de
la contienda, de nuevo emergió el injusto protagonismo colegial, que
no tuvo una actuación acertada en el invite dadas las diversas
decisiones de notoria controversia contra los visitantes, decretando
una inexistente pena máxima en el área
azul tras un salto en pugna por el balón entre los contendientes,
expulsando a Maxime por doble amonestación (min 96) y permitiendo
así al equipo de David Rodríguez, que compitió el último cuarto
de hora con un efectivo menos por la expulsión de su goleador
Ricard, anotar el tanto de la igualada por mediación de su
guardameta Ángel (min 94). Esta decisión perjudicó y dañó
seriamente los intereses azulones en una agridulce matinal dominical.
La Grama, con actitud, concentración,
esfuerzo, garra y pundonor, disputó un buen encuentro en lineas
generales, con una buena actuación en todas sus lineas y de la
totalidad de sus jugadores. Mantuvo una linea regular y exponencial
de juego, progresando de menos, con una primera entrega en la que
propuso un juego elaborado, profundo, con combinación pero algo
indefinido, diluido especialmente en la medular e inconexo, que
generó interesantes llegadas eminentemente a balón parado, con
acciones reseñables y además en unos segundos cuarenta y cinco
minutos, en los que el equipo mantuvo la tónica pero anduvo muy
entonado y acertado. Consiguiendo trenzar juego, con una óptima
conducción fluida, llegando en profundidad por banda, con Rubén y
Baby y propiciando un correcto remate sobre al
área de un rival simple, correoso y vertical, que manifestó un
sistema vetusto y arcaico con profundidad directa, apuntalado en sus
dos exponentes ofensivos: Kalu y Ricard, que llevaron el peligro y la
intranquilidad a una segura retaguardia visitante.
En el primer acto, la cita dió inicio
en sus primeros compases con el habitual reconocimiento entre las
escuadras y un juego de imperante contacto. Escaseó la vida ofensivas por ambos
bandos hasta cercana la media hora de juego, reseñando el disparo de
los locales que Carlos muy atento despejó con el pié al primer palo
(min 8) o el remate de Allué que marchó fuera tras una falta lateral
servida a la perfección por “Baby” (min 13). Pero en la primera llegada seria del
encuentro, el delantero Kalu, aprovechó un pase profundo filtrado
por el centro, tras una incorrecta transición defensiva visitante,
para hacer subir el primero en el ausente marcador de la instalación
ribereña. (min 26). La Grama, a pesar de saberse por detrás
en el electrónico, no se arrugó y siguió insistiendo en busca del
empate y con su juego profundo, trató de llegar a las inmediaciones
rojiblancas con exquisitas asistencias de Baby, que no
encontraban dueño y remate. Marcelo en un libre directo lateral
votado por Baby, anotó en el segundo de los dos remates
ejecutados, pero el colegiado dictaminó falta al guardameta (min
29). El choque algo embarullado, no tenia un
dominador y se producían llegadas dispares para ambos conjuntos pero
sin acierto ofensivo. La Grama no acababa de carburar. Sobrepasada la media hora, el brasileño Coka lo probó con un lanzamiento de falta lejano que marchó
alto (min 32) y la réplica local llegó en un disparo cruzado de
notable peligro que traspasó la línea de fondo rozando la madera
(min 34). Dos minutos más tarde, se produjo la
primera jugada para la moviola cuando en una carrera por banda entre
Damián y el delantero Ricard tras un pase profundo, el defensa
azulón cometió falta en el forcejeo fuera del área, pero el
árbitro de manera incoherente consideró pena máxima. Con todo el
lanzamiento fue errado por el combinado hospitalense. El Santa Eulália pudo poner tierra de por medio pero
afortunadamente el choque continuaba muy abierto y todo podía
acontecer. Con una situación antirreglamentaria
señalada a Baby que no existió y con la escasa renta goleadora
local, concluyeron los primeros cuarenta y cinco minutos en el
Municipal hospitalense.
Tras el descanso, el choque giró en
rotundo y fueron los hombres de Remo, los que en los primeros veinte
minutos se apoderaron por completo del cuero para absorber cuota de
balón, dominando la contienda con rigor para maniatar a
los ribereños que se observaron sobrepasados y desdibujados. Los visitantes saltaron fulgurantes en
pos de conseguir revertir el marcador que campeaba sobre el sintético
del Llobregat y así en el primer minuto cuando el respetable aún
ocupaba sus respectivas localidades, una contra bien dirigida por el
cuadro azulón, permitió a Rubén encarar a su marca por banda para
entrar al área rival donde fue claramente derribado. El colegiado no lo dudó y señaló el
punto de once metros, des de donde Marcelo anotó el tanto que hizo
subir las tablas al marcador (min 48) en su primera diana de la
matinal. La Grama había hecho lo complejo,
anotar en los primeros compases sorprendiendo a un cómodo y bien
colocado equipo local que no estaba realizando un buen encuentro. Cuatro minutos después, de nuevo
decisión colegial de dudosa credibilidad, con un fuera de juego
pitado a Rubén que entraba en carrera correctamente por detrás del
balón. En el 57, los visitantes pudieron
ponerse por delante, pero el remate de Maxime al primer palo tras
falta lateral servida correctamente por Baby, impactó en la
madera del portal defendido por Ángel. La Grama acrecentaba sus visitas sobre
el área rojiblanca y merecía el segundo. Y así, tres minutos más tarde y tras
una excelente parada de Carlos Blanco evitando la diana, una excelente y
magistral jugada por banda de Baby, permitió el centro
en “pase de la muerte”, para que Marcelo tras rechace de un
defensa que la sacó bajo palos anotara el segunda en su cuenta,
poniendo en ventaja y de manera merecida al cuadro azul (min 60). Un minuto después, Baby lo
probó pero su disparo exterior centrado lo atajó el cancerbero. Sobrepasado el minuto veinte y con la
mínima ventaja para los gramenetistas, el encuentro volvió a girar
para propiciar un cambio de sentido. Los de David Rodríguez, se apropiaron
progresivamente del control del balón y estiraron lineas en busca de
devolver las tablas en el marcador ante una Grama bien posicionada y
pertrechada que defendía con orden las peligrosas incursiones
ribereñas. En el 68, primera expulsión del
choque. El jugador local Joel, que había sido substituido, fue amonestado en el banquillo, era la segunda cartulina. Un minuto después se produjo una clara
acción rojiblanca con un remate al segundo palo que marchó fuera. En el 75, de nuevo expulsión para el
bando local, Ricard por una dialéctica despectiva hacia el
colegiado, recibió la cartulina roja directa, dejando a su equipo
con un efectivo menos para los quince últimos minutos. Esta situación la trató de aprovechar
la Gramenet, intentando contemporizar el encuentro retornando a la
posesión, pero no lo consiguió, dejando el choque sin cerrar a
pesar de las claras intentonas ofensivas. A nueve minutos para la finalización,
Rubén con síntomas inequívocos de lesión, que deseamos no
revistan gravedad alguna, fue sustituido por Iván, con lo que la vanguardia además tomaba frescura ofensiva. Pero en los últimos cinco minutos de
encuentro más el añadido, el choque enloqueció por completo y se
tornó en un torbellino con nervios para uno y otro bando. En el 82 el técnico local y en el 86
el máximo responsable del banquillo azulón, fueron expulsados con
sendas rojas directas, en el caso de Remo de manera inexplicable y
por el mero hecho de traspasar la zona de área técnica. Con el tiempo cumplido, el cuerpo
técnico visitante con buen criterio, para marcar el tempo y rebajar
el ritmo y las acometidas del rival, introdujo un doble cambio
incorporando al terreno de juego a Heredia y Carrillo que aportarían
además refresco en los últimos instantes. El Santa Eulàlia lo siguió probando y
a pesar de tener un hombre menos dispuso de un disparo que impactó
en el palo corto, helando el aliento a los aficionados visitantes. Y cuando el choque tocaba a su fin y
los visitantes acariciaban una más que justa victoria, el colegiado
nuevamente y de manera totalmente surealista, señaló el punto
fatídico, tras un salto entre Maxime y un efectivo ribereño. El juez
de la contienda expulsó al jugador francés. El lanzamiento desde los once metros
ejecutado por el portero local, traspasó la linea
de gol (min 96), restableciendo las tablas que serían ya definitivas
con el pitido final que dictaminó un injusto reparto de puntos en el
Barrio de Santa Eulália que sentó como un jarro de agua fría para
el colectivo gramenetista.
ALINEACIONES :
Santa Eulália CF: Ángel; Limberg;
Marc (Gerard min 46); Cristian (Doblas min 53); Alexis (Francesc min
66); Ricard; Enrique; Casas; Alejandro (Daniel min 66); Joel (Álex
min 66); Kalu
UDA Gramenet: Carlos Blanco; Baeza;
Damián; Maxime; Adam; Melendo; Allué; Coka (Heredia min 89); Rubén (Iván
min 81); Baby; Marcelo (Carrillo min 89)
GOLES :
*1-0 Gol de Kalu Oji, quién en una
contra profunda por el centro, se apropia del cuero para zafarse del
defensor y tras la salida de Carlos batirle por bajo con un disparo
raso que se interna en el portal a trompicones. Min 26.
*1-1 Gol de Marcelo Villegas, des de
los once metros. Disparo potente, a media altura que se aloja por el
centro tras la estirada fallida del portero al lado izquierdo. Min
48.
*1-2 Gol de Marcelo Villegas. Baby
ejecuta una gran jugada por banda izquierda según el ataque azulón,
llega a la linea de fondo y realiza un pase de la muerte que Marcelo
remata, un defensa la saca bajo palos, pero el cuero cae en interior
del área y de nuevo el goleador, recepciona el esférico y de
disparo raso, colocado y tras impactar en el pié de un defensor de
aloja por la esquadra al segundo palo. Min 60.
*2-2 Gol del guardameta Ángel Elías
quién anota des del punto fatídico con un disparo potente por el
centro ante el que nada puede hacer un voluntarioso Carlos. Min 94.
CARTULINAS :
Santa Eulália CF: Marc min 81;
Alejandro min 46; Joel min 56 + 68 (tarjeta roja doble amonestación);
Enrique min 63; Ricard roja directa min 75; David Rodríguez roja
directa min 82;
Daniel min 89
UDA Gramenet: Damián min 35; Coka min
50; Adam min 52; Maxime min 52 + 93 (tarjeta roja por doble
amonestación); Melendo min 65; Baby min 73; Allué min 85; Remo roja
directa min 86; Carlos Blanco min 87.
INCIDENCIAS :
Partido disputado en el
Municipal de Santa Eulália en Hospitalet de Llobregat. Buena
presencia de aficionados de la Gramenet que animaron a su equipo sin
cesar en una matinal de otoño soleada y de temperatura apacible. Ha sido la primera vez en nuestros 94 años de historia, que un portero rival nos hace un gol.
